Hostelería y verano
El verano es una de las épocas del año que más beneficios reporta a la hostelería. El calor, las vacaciones y el buen tiempo hacen de bares y restaurantes un preciado destino para el ocio estival.
Sin embargo, el clima característico de nuestro país puede posicionarse como un arma de doble filo. Por un lado, el tiempo anticiclónico lleva a la ciudadanía a pasar más tiempo en bares y restaurantes y, por otro, las elevadas temperaturas frenan las ganas de salir de casa. Por consiguiente, disminuye la clientela y los óptimos beneficios esperados en esta época se ven mermados.
En definitiva, el hostelero debe reinventarse y buscar fórmulas que le permitan seguir incrementando sus beneficios, incluso cuando los clientes no acuden al local.
¿Cómo recuperar las pérdidas que provocan las jornadas de intenso calor?
Apostar por los pedidos online
En los últimos años, la hostelería ha tenido que sufrir una reinvención para mantener la rentabilidad de un sector que se ve perjudicado por diferentes circunstancias. La más reciente, la pandemia de la covid-19.
El confinamiento domiciliario, las continuas restricciones, así como el temor de cierta parte de la población a entablar contacto directo con el resto de personas, ha provocado un giro en la forma de consumir en bares y restaurantes.
Es cierto que los pedidos a domicilio llevan años realizándose. Sin embargo, la mayoría de ellos se ejecutaban a través del teléfono. El cliente llamaba al local y ordenaba su pedido. Si bien el contacto restaurador-cliente a través de este método es más estrecho, a menudo da pie a equívocos y se trata de un sistema tedioso, tanto para el cliente como para la persona que atiende.
Las nuevas tecnologías y el continuo proceso evolutivo que vive la sociedad, llevan a los empresarios de la restauración a tomarse en serio la integración de ciertas herramientas tecnológicas y, por consiguiente, la digitalización de su negocio.
El proceso de digitalización de un restaurante comienza con un sistema de pedidos online intuitivo y óptimo para que el cliente pueda ordenar pedidos desde su casa y de la manera más sencilla y eficiente posible.
Beneficios de los pedidos online para el restaurador
La posibilidad de realizar pedidos desde casa, a través del propio smartphone y sin tener que enfrentarse a posibles saturaciones en líneas telefónicas, se traduce en un activo muy valioso tanto para el empresario hostelero como para el cliente.
La posesión de una carta online e interactiva da lugar a numerosos beneficios:
1. Aumento de ingresos de forma exponencial
La oferta de una carta abierta y totalmente interactiva, con posibilidad de ser visualizada en cualquier momento, induce al incremento del pedido. El cliente pide más de lo que pensaba pedir en un principio.
2. Desaparición de errores en comandas
Atrás quedan los errores ocasionados por la falta de entendimiento a través del teléfono. Con un buen sistema de pedidos online se evitan todo tipo de malentendidos y errores humanos.
3. Obtención de información
Los sistemas de pedidos online permiten conocer los gustos y patrones de pedido de cada cliente. Gracias a los datos que se aportan en la plataforma online, el hostelero tiene la posibilidad de lanzar ofertas y utilizar mecanismos de fidelización.
4. Reducción del tiempo de espera y aumento de la rotación de mesas
La digitalización aporta instantaneidad. Una carta digital es modificable en cualquier momento y desde cualquier lugar.
Asimismo, una carta virtual, intuitiva e interactiva, agiliza los procesos de ejecución de pedidos, reduciendo con ello el tiempo de espera por parte del cliente, así como aumentando la rotación de mesas en el restaurante.
Banzzu, alternativa para pedidos online
En pleno 2021, la digitalización de restaurantes se ha convertido en una realidad cada vez más instaurada. Las nuevas formas de vida de la sociedad incitan a los empresarios de la restauración a realizar modificaciones en su modelo de negocio.
En este sentido, startups como Banzzu, nacen para integrarse en la nueva sociedad digitalizada como intermediarias en ese proceso, para facilitar lo máximo posible al hostelero la integración de la tecnología en su negocio.
